Introducción
Apuesto que piensas que soy el exitoso autor de un libro muy popular de seducción
(es decir, el que estas leyendo ahora), que soy un conquistador de nacimiento quién
nunca ha tenido ningún problema en conseguir mujeres. Si, claro…
Recuerdas al tipo con quién fuiste a la escuela secundaria quien no cabía en el
departamento de habilidades sociales ¿Ese tipo que no podría conseguir una cita ni en
una apuesta? ¿Ese tipo quién era torpe para hablar y que ni siquiera podía sostener
una conversación decente? Yo era ese tipo.
A lo largo de la escuela secundaria y comienzos de la universidad, no tenía ningún
amigo, no salía con nadie, y de mujeres ni hablar…. Me pasaba mi viernes y sábados
por las noches solo, sexualmente frustrado. Mi cumpleaños 21 vino y se fue, y todavía
era virgen. Era miserable y no sabía como cambiar eso.
Para empeorar las cosas, me tomé mis fracasos personalmente. Me imaginé que
debía haber algo fundamentalmente malo en mí, y debido a eso, me sentía
profundamente deprimido.
No me gustó sentirme así, y me negué a aceptar que la situación no tenía esperanzas.
Así que decidí hacer algo al respecto. El éxito con las mujeres era una habilidad que
noté que otros tipos tenían, y estaba determinado aprender lo que ellos sabían.
Durante los próximos años, me puse a trabajar.
Me salí de mi manera de ser y pasé a hacer amistad con esos tipos que tenían éxito
con las mujeres y copié las cosas que ellos hacían. Leí de psicología y literatura de
comunicación al punto que podría jurar que sabía más sobre el tema que algunos de lo
que los profesores de psicología de mi universidad. Trabajé obsesivamente para
mejorarme en cada manera imaginable, de mi actitud a mi físico.
Para aprender a hablar con las mujeres, dejé los nervios a un lado y hablé con muchas
chicas. E incluso cuando me estrellaba, aprendía de la experiencia.
¿Y sabes qué? Todo me fue retribuido. Inventé el sistema a que voy a enseñarle, y
desde entonces lo deduje simplemente no creería el éxito que he tenido con las
mujeres.
Ya no soy un chiquillo extraño-ando cerca de los cuarenta. Y puedo decir
honestamente que he cumplido mis sueños en lo que concierne al amor y al sexo, y
estoy contento en cada sentido que se pueda mencionar.
Como dije, leí bastante sobre psicología y comunicación para hacerme un experto en
algunas áreas, y he compartido con algunos de los hombres más exitosos con las
mujeres. Pero no tienes que pasar por todo esto, porque lo he condensado abajo para
ti, lo más sencillo posible.
Este libro es una condensación de todo lo que he aprendido y usé para convertirme en
exitoso. No sólo eso, sino que la información que voy a compartir contigo es el material
que he usado para entrenar a otros hombres para ser exitosos.
Así que mientras te embarques en tu propia jornada hacia la auto-mejora, asuma que
el consejo que leíste en este libro trabaja hasta que se pruebe lo contrario. ¡En
otros términos, tienes que tener fe!
Este libro lo pone en línea para saber lo que las mujeres encuentran atractivo en un
hombre y le muestra paso a paso cómo no sólo puedes actuar de manera atractiva
sino también realmente conviértase en un hombre atractivo. Y cuando te vuelvas un
hombre atractivo, lograras tus sueños sólo siendo tu mismo.
Una nota personal a aquéllos que podrían estar pensando: “Sí, suena grandioso, pero
yo soy quién soy y eso no va a cambiar.” ¡Tonterías!. El cambio está en su mente.
Como te imaginas, así tu ha de ser. Noventa por ciento de ser exitoso es creer que
puedes ser exitoso. Nosotros hablamos de imagen mental aquí, que es una técnica
que casi todos atletas de la cima usan. Ellos se visualizan siendo ganadores.
Piense en esto por un momento: supongamos que ganaste la lotería, ganó en grande.
Tienes un millón de dólares. Si fueras a caminar esta noche a un club, ¿crees que
caminarías más confiado? ¿Se proyectaría con más autoridad? Efectivamente ¡lo
harías! Las chicas siempre saben cuando un tipo tiene algo a su favor, ya sea el
dinero, poder, o cualquier cosa, sólo por la forma como se maneja.
Y yo no voy a mostrarle sólo cómo manejarse, sino cómo tener realmente más
confianza, para que pasees, hables y prácticamente le grites al mundo, “Ey, ¡SOY LO
MÁXIMO!”
“Las mujeres son demasiado complicadas”
“Las mujeres tienen muchas necesidades”
“No entiendo a las mujeres”
Escuchas esto todo el tiempo. Y, honestamente, tiene sentido. Otros hombres dicen
que porque es más fácil levantar las manos y simplemente relacionar a las mujeres
como cajas negras que no pueden entenderse que intentar y envolver sus mentes
alrededor de las mujeres que puedan comprender.
Aquí está lo que necesitas entender sobre las mujeres, y las noticias buenas son: ellas
son criaturas en un principio y a un nivel biológico, muy sexuales. De hecho, ellas
probablemente disfruten más aun el sexo que nosotros. ¿Has notado cómo las
mujeres gimen durante el sexo mucho más de los hombres?
Lo que todas las Mujeres Temen Vivir (y el truco
para aliviar esta ansiedad y lograr que ellas
hagan cualquier cosa que le pidas)
Desgraciadamente, la sociedad condiciona a las mujeres a creer, en la porción lógica
de sus mentes, (no la porción emocional) que está “mal” disfrutar del sexo.
Debido a que las mujeres tienden a ser las criaturas sociales (más así que los
hombres, por razones de psicología evolutiva), etiquetas como “mujerzuela” o
“prostituta” tiene un fuerte efecto negativo en ellas.
Ninguno de estas multas se aplica a hombres que tienen mucho sexo. Así, la tragedia
suprema del sistema misógino puesto por la religión y la sociedad para reprimir la
sexualidad de las mujeres es que los hombres tienen más de un desafío en conseguir
sexo que ellos tendrían si regresaran a tiempos de la pre-civilización cuando las
mujeres eran salvajes y desinhibidas.
Así que su trabajo como un hombre en la sociedad moderna es ir alrededor del
condicionamiento social de la mujer y sacar a la mujer natural dentro de ella.
¿Suena difícil? ¡Créame, no lo es! En cierto modo, las mujeres están como los
candados. Ellas parecen imposibles si estás usando las llaves incorrectas, pero una
vez que encuentras la llave correcta, ellas se abren fácilmente. Y sí, puedes hacer
esto. Voy a mostrarte cómo.
Para sacar a la mujer natural que yace en lo más profundo de cada mujer, debes
tener siempre presente que en un nivel subconsciente, las mujeres aman el sexo y
ellas lo quieren tanto (y quizá más) como nosotros lo queremos.
suficientemente malo, una más poderosa fuerza yace dentro de ellas: su biología. Una
consecuencia perfectamente natural que puede ser el resultado de tener sexo es el
tener bebés, y toda mujer lo sabe.
Y ella sabe que si queda embarazada cuando no se supone que quede embarazada,
las personas hablarán. He ahí la tragedia suprema de las mujeres; a pesar del sexo
amoroso, ellas no pueden ser libres con su sexualidad sin ser etiquetadas como una
mujerzuela.
Así que mientras tú--como un hombre sexual—dirige sus encuentros con las mujeres
hacia el sexo, necesitas impedirle sentirse como una mujerzuela.
(A propósito, es para su propia ventaja ser discreto con las mujeres. Lo último que
debes hacer en la vida es estar como los machos beta buscadores de aprobación que
presumen a sus compañeros sobre las mujeres que ellos han llevado a la cama. ¡Tú
no necesitas la aprobación de tus compañeros, así que salte de la charla del vestuario!
Los hombres reales no necesitan hacer eso.)
Ha hablado con tipos que le dicen, “¿Nosotros los hombres nunca entenderemos a las
mujeres”? Bien, las mujeres realmente no son tan misteriosas o difíciles de entender
como esos tipos piensan. Ni son diferentes de nosotros como algunos de nosotros
podríamos pensar.
Desde que nosotros sabemos que las mujeres quieren sexo, está bien para ti anotar
en tu agenda tener sexo cuando interactúa con ellas. De hecho, realmente es una
buena idea.
Lo que debes evitar hacer a toda costa, sin embargo, es verbalizar sus intenciones.
Tu NO quieres decir algo sobre el sexo, o de su intento por tenerlo, a la mujer.
Siempre que reveles sus intenciones sexuales a una mujer diciendo algo sobre él, tú
compromete la porción lógica de su mente, causando que se dispare su
condicionamiento social. “Oh oh,” ella piensa. “Este tipo es vulgar, asqueroso, y me
produce escalofrío. Y no podría terminar siendo una mujerzuela aquí.”
Así que evite al ser explícito sobre el sexo, y contenga la parte de atrás de su mente
cuánto aman las mujeres el sexo, y trabaje en proyectar la sexualidad sin decir nada
en absoluto al respecto. Use el idioma de su cuerpo, no de su boca.
esta historia continuara......
espero q este bien traducido....
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